¿Qué deporte es malo para el suelo pélvico?

El deporte es sin duda una excelente manera de mantener una buena salud física, pero no todos los tipos de ejercicios son igual de beneficiosos para todas las partes del cuerpo. El suelo pélvico es una zona particularmente delicada, especialmente para las mujeres, y puede verse afectado negativamente por ciertos deportes de alto impacto. Estos ejercicios pueden aumentar la presión abdominal y debilitar esta musculatura clave, provocando problemas como la incontinencia urinaria o incluso prolapso de órganos pélvicos.

1. Deportes de alto impacto y el suelo pélvico

Los deportes que implican un impacto constante sobre el cuerpo, como correr, el CrossFit, o el uso de camas elásticas, son perjudiciales para el suelo pélvico. En particular, el running o correr es uno de los más practicados, pero a largo plazo puede debilitar esta área debido al repetido impacto en el abdomen. Aunque es un ejercicio saludable, si no se toman precauciones como el uso de calzado adecuado o el fortalecimiento previo del suelo pélvico, puede generar problemas importantes.

2. Deportes con movimientos bruscos

Deportes como el tenis y el pádel, que parecen inofensivos, también generan un gran impacto en la musculatura pélvica debido a los movimientos bruscos y repetitivos que se realizan durante los partidos. En estos deportes, el aumento brusco de la presión abdominal en cada golpe puede debilitar el suelo pélvico a lo largo del tiempo. Este tipo de impacto puede ser perjudicial, especialmente para personas con debilidad previa en esta zona.

3. Deportes con saltos repetitivos

Cualquier deporte que implique saltos constantes, como el aeróbic, halterofilia, o trampolines, genera una gran presión en el abdomen, que se transfiere directamente al suelo pélvico. Estos movimientos de impacto, si se realizan sin el adecuado fortalecimiento del core y el suelo pélvico, pueden llevar a un deterioro progresivo de esta zona.

4. El ciclismo y el suelo pélvico

Aunque el ciclismo es un deporte de bajo impacto, puede llegar a ser perjudicial si se realiza con una mala postura o en terrenos irregulares. Las posiciones prolongadas sobre el sillín y los levantamientos del asiento pueden incrementar la presión en el suelo pélvico. Para evitar problemas, es importante ajustar adecuadamente el sillín y la altura del manillar, además de evitar superficies abruptas.

5. ¿Cómo proteger el suelo pélvico durante el ejercicio?

Para evitar problemas en el suelo pélvico, es fundamental fortalecer esta área antes de comenzar deportes de alto impacto. Ejercicios como los hipopresivos y los Kegel son muy recomendados, ya que ayudan a mejorar el control y la resistencia de esta musculatura. Además, se recomienda reducir la intensidad o la frecuencia de los deportes de impacto y combinar la rutina con actividades de bajo impacto, como la natación o el yoga, que ayudan a fortalecer el core sin dañar el suelo pélvico.